temblamos, dudamos, lo pensamos
y otra vida se desgarra en otra esquina.
reflexionamos, analizamos, sopesamos
y lentamente crecen las estadísticas
de maltratadas, desaparecidos, asesinados.
nos civilizamos, nos educamos, nos enbellecemos
y ocultamos al animal nacido para sobrevivir.
nos ocultamos, nos negamos, nos tememos
y cada día una nueva injusticia, una herida abierta.
Y pasan los días y dudamos actuar,
cobardes o pasotismo, miedo o indiferencia
las cifras se multiplican
y echamos culpa, pero no podemos.
somos nosotros tan culpables.
No actuamos, y la vida pasa
ante un metro que se cierra
como los ojos de nuestra indiferencia.
No actuamos, nos cuesta
la agilidad, el valor,
el pie pisando fuerte
y gritando basta.
Nos cuesta afrontar la realidad
oscura e incomprehensible,
ardiente y violenta.
Pero vive, en cada esquina,
en cada recoveco donde alguien
sufre, muere, clama.
Y el silencio es fuerte y estruendoso.
Lo vemos, dudamos, lo negamos
y puede que otra vida vaya cayendo
en nuestras manos, en nuestra debilidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario